El cultivo de viñedos es una actividad con gran peso como actividad económica en España, pero también con gran valor cultural y una larga tradición en el país. Tanto si se trata de grandes explotaciones, como si son viñedos que se cosechan para uso personal, este cultivo lleva asociadas una serie de labores agrícolas inapelables, independientemente del lugar en el que se encuentre.
Debido a que las características del viñedo pueden ser muy diferentes según el territorio o localización, una estupenda herramienta para asistir en estas labores agrícolas para viñedos es la gama de vehículos todoterreno utilitarios de Yamaha Agro, donde se encuentran 4 ruedas side-by-side (que van cubiertos) y, sobre todo, una amplia oferta de ATVs, también conocidos como quads.
Los ATVs de Yamaha Agro ofrecen soluciones para viñedos que facilitan y hacen más disfrutables las labores agrícolas necesarias para el cultivo de la vid, sin importar las condiciones geográficas o climáticas del terreno. Estos son vehículos compactos, muy versátiles y resistentes capaces de acceder y desplazarse por cualquier tipo de terreno, que además ofrecen al viticultor confort, seguridad y máximo control.
Labores agrícolas en el cultivo de viñedos
Existen varias actividades con maquinaria necesarias para el cultivo de viñedos; estas son algunas de las principales labores agrícolas:
Laboreo del terreno
El suelo es la base principal de cualquier tipo de cultivo y, por ello, si queremos que la cosecha prospere, es fundamental que esté en buenas condiciones. Para que lo esté, es importante que “respire”; que, después de la recolección de frutos, tenga un periodo de descanso en el que el suelo esté desnudo (sin cubierta vegetal) y se pueda preparar para la siguiente cosecha.
En el laboreo vitícola del suelo, lo que se pretende principalmente es destruir malas hierbas que puedan acarrear enfermedades o robar recursos (agua, nutrientes) de las vides, airear la tierra y conseguir retener la humedad. El número de labores suele estar entre las 5 y las 10, aunque en algunas regiones pueden ser más. Dependiendo de la finalidad, por ejemplo, si se trata de la plantación de un viñedo o si simplemente son labores de mantenimiento, se trabajará a una profundidad distinta.
Plantación de las vides
Antes de plantar un viñedo, es importante hacer un buen estudio del terreno y seleccionar las plantas adecuadas a sus condiciones. A diferencia de otros cultivos, a veces, los espacios más adecuados para el cultivo de viñedo están restringidos a un espacio muy concreto; por eso, cuanto mejor aprovechemos los espacios de cultivo, mejor.
Con el suelo bien preparado, a la hora de plantar habrá que tener en cuenta que se favorezca al sistema radicular de las vides. Para ello, también las plantas tendrán que estar preparadas; cuanto más larga es la raíz, más fácil que salgan nuevas raicillas que ayuden al crecimiento, pero, si son demasiado largas, se pueden producir curvaturas exageradas que generen estrés en la planta, lo cual es peligroso.
Abonado y tratamientos fitosanitarios
Tanto antes de plantar, como durante el proceso de crecimiento de la planta y entre cosecha y cosecha, es importante asegurarse de que el suelo cuenta con los nutrientes necesarios y, en caso de notar alguna deficiencia, proporcionarlos. Existen diferentes productos que se pueden utilizar como base del abonado de la vid, principalmente fertilizantes y estiércol.
Del mismo modo, también es crucial detectar cualquier tipo de elemento, como hongos o insectos, que puedan provocar enfermedades, y actuar rápidamente contra ellos con la aplicación del tratamiento adecuado.
Podas
La poda de la vid o poda de fructificación se hace para reducir la parte vegetativa y así limitar el crecimiento natural de la vid y mejorar así su rendimiento y la calidad de las uvas. Normalmente, se realiza cuando la planta está en reposo vegetativo, durante el invierno, aunque también hay otras podas, como la poda verde de primavera, que se realizan para que la vid no crezca de manera descontrolada.
Barrer, recoger y triturar los sarmientos
Después de la poda, las calles del viñedo se llenan de desechos -pequeñas ramas- que se conocen como sarmientos. Es necesario utilizar una máquina para recoger estos sarmientos y dejar la viña limpia.
Tras barrer y recoger los sarmientos, estos se pueden utilizar de distintas formas. En los viñedos más grandes, se suelen triturar para hacer compost que luego se usa como abono; en los más pequeños y familiares, tradicionalmente se recogen estas ramitas y se atan en manojos conocidos como gavillas que luego se utilizan para encender fuegos.
Cómo ayuda un vehículo ATV en las labores agrícolas
El cultivo de viñedos implica distintos tipos de labores agrícolas que requieren al mismo tiempo potencia y precisión en campos que, a menudo, son de dimensiones reducidas o difícil acceso. A esto hay que añadir que, en algunas zonas geográficas, se suman adversidades meteorológicas que dificultan estas labores. Por todo ello, para llevar a cabo las labores agrícolas para viñedos necesitaremos maquinaria que ofrezca robustez y control.
Esas son dos de las características principales de los ATV de Yamaha Agro. Estos vehículos de 4 ruedas tienen una baja relación peso-potencia, lo que les permite desplazarse por todo tipo de terrenos y adaptarse a sus dimensiones. Los ATVs agrícolas cuentan con diferentes sistemas de conducción que facilitan su maniobrabilidad y garantizan la seguridad del viticultor, que puede llevar a cualquier rincón de su viñedo de manera cómoda y sin dificultad.
Además, a estos vehículos se les pueden acoplar distintos tipos de aperos o maquinaria que sirve para desarrollar las labores agrícolas necesarias en el cultivo de viñedos. Así pues, no se trata solo de un vehículo de transporte de personas y materiales, sino que realmente es una herramienta multitarea.